A ti amiga, que vas a ser mamá

Respira, vas a ser madre toda tu vida...

Hace unas semanas me dieron una buena noticia, una compañera va a ser mamá. ¡Qué alegría! 

Después de las típicas preguntas de ¿Cómo estás?, ¿Cómo te encuentras?, ella contestó: "pues estoy asustada"...

Y yo me acordé de cuando supe que iba a ser mamá por primera vez: parecía que comenzaba una carrera contrareloj para aprender todo lo posible (libros, Internet, sabiduría de otras madres...). En definitiva, estar preparada para el momento en que me convirtiera en mamá.

Cuando mi compañera me dijo que estaba asustada, en seguida lo recordé: eso mismo sentí yo.

Pero querida mía un único consejo te voy a dar: respira, vas a ser madre toda la vida.

Vendrán tiempos de cambio¿?, sí. 

Noches en vela y días de sueño¿?, sí.

Decisiones difíciles, guiadas por tu instinto¿?, sí.

Pero también vendrán montones de abrazos porque sí, bailes improvisados al ritmo de la música de los dibujos, risas en el ascensor porque le sacáis la lengua a vuestro reflejo en el espejo...

Querida amiga, vas a ser madre, desde ya...

Y aunque no todo es de color de rosa, ni se parece lo más mínimo a cómo nos lo contaron... llegará el día en el que te oigas a ti misma decir: "mis hijas son lo más grande de mi vida".

Descubrirás el amor incondicional, la preocupación sincera por otra persona que no eres tú, la sinceridad de las palabras "te quiero", la felicidad...

Y será más importante para ti lo que tu hijo opine de ti, que lo que digan los demás. Querrás que se sienta orgulloso de ti. Te emocionarás cuando le oigas presumir de ti. 

Vas a ser mamá: trabajo a tiempo completo, profesión sin formación previa... Pero confía en ti, porque desde el momento que supiste que estabas embarazada, algo en ti se activó...

Ya no hay vuelta atrás: ¡vas a ser mamá!