martes, 10 de mayo de 2016

Consejo filosofia molona: abrazoterapia...

No creas que el día no puede ir peor, porque va y te escucha... 

Ayer fue lunes de estreno, mi primera incursión en el mundo del Pilates. No tenía ni idea de que había diferentes tipos de Pilates y que unas clases eran en suelo y otras con máquinas.
Hoy no solo puedo contaros cosas sobre el Pilates, también puedo notar músculos que no sabía que tenía o por lo menos no era consciente hasta que me he levantado hoy por la mañana...
He pasado toda la noche dando "saltos" en la máquina aunque mi cuerpo estuviera tumbado en la cama. ¡Qué noche! o como decía Raphael:
¿Qué pasará? ¿Qué misterios habrá? Puede ser mi gran noche... Tararán...
Sí, fue una gran noche, de vueltas pa un lado y pal otro... Tanto que cuando sonó el despertador por la mañana, le miré bastante mal y le llamé de todo menos guapo. Se salva de que es una aplicación en mi querido móvil, que si nooooooooo... Argggggggg
Pero bueno, conseguí ponerme en pie y llegar al trabajo (que no es poco); pero en los huesos notaba que hoy no iba a ser muy buen día... Ya sabéis, esos días en que sabes que puede pasar de todo y te preguntas: ¿qué puede salir hoy peor?
A ver, digo yo... Que no tienes por qué hacerme tanto caso, querido día, que yo no quiero más "cosas torcidas"...
Pero a la hora de la comida, esa sensación era cada vez más fuerte, el desánimo, el cúmulo de circunstancias, las agujetas por todo el cuerpo... y que encima: los refuerzos se iban.
¡oh my god! ¡sálvese quién pueda! ¡socorrín rrín rrín!
Pero no me entendáis mal, no es que se vayan los refuerzos, nos quedemos solos ante el peligro y entre los dos no formemos ni 1 entero bueno.... que también!!!
Sobre todo es que ya me estaba acostumbrando a tener de nuevo alguien en casa esperando con la comida caliente y en la boca un ¿qué tal te ha ido?, que te repite unas 4 veces porque sabe que a la primera le vas a contestar un "bien", que esconde mucho más...
Voy a echar de menos tener en casa a la madre que te llena la nevera a "bajo coste" (por no decir gratis porque, casualidades de la vida, ha perdido el ticket de compra), a la abuela que se desvive por sus nietas y compra a hijanumerouno pañuelos con "dibujinos de Frozen"...
Voy a echar de menos el padre que te hace participe de sus pensamientos y sus conversaciones, el abuelo que pone música a hijanumerodos para culturizarla...
Hoy estamos un poquito tristes en esta casa, por lo menos el género femenino. Las cosas se ven de otra manera cuando tienes en casa a abuelayatevale y abuelobajantodoslosantos. Y, aunque reconozcámoslo, mi vena "poco cariñosa" o de no dar "muestras de cariño en forma de besos y abrazos", me viene de familia.. jajaja, hay miradas que abrazan más que algunos brazos...
Hoy estamos un poquito tristes, porque ya les echamos de menos y porque hoy el puerto separa más que nunca...
Así que si coincidís con alguno de nosotros estos días, gritadnos eso de "arriba las manos, esto es un abrazo", que seguro que lo necesitamos. ;)

No hay comentarios:

Publicar un comentario