Si has empezado a leer esto con la ilusión de descubrir que por fin me había convertido en madre imperfecta... ya lo siento...
Hace una semana casi lo consigo y hoy pues casi casi.
La realidad es que no lo he conseguido pero me he ganado 2 medallas como madre. Os cuento:
Hoy el día comenzaba más temprano de lo habitual porque hijanumerodos había tenido un "accidente" nocturno...
Asi que como madre imperfecta que soy y saltándome todos los mandamientos de una madre perfecta, le cambié el pijama y la metí EN MI CAMA y con LOS DIBUKOS (si, entiéndanse como mayúsculas chillonas)
Cuando yo cerraba un ojo, ella me llamaba, cuando yo me daba la vuelta ella me tocaba un hombro... y claro, así como no va a despertarse con una sonrisa.
- bien vestidas
- bien peinadas
- bien perfumadas
Toma ya!! Me gané mi primera medalla...
Así que cuando bajábamos en el ascensor, las 3 juntas y sin discusiones ni peleas mañaneras, estallé en carcajadas viendo por el espejo cómo hijanumerouno me miraba poniendo caras para hacerme reír.
No os voy a contar cómo discurrió el resto del día porque seguro que os hacéis una idea... carreras-trabajo-broncas-más trabajo-más carreras...
Y por fin el final del día y un apetecible plan a la orilla de un río, a la sombra... me gané la segunda medalla como madre.
También pensaba que como esposa pero un "manda..." desde la cocina me hizo pensar lo contrario.
Pobre maridotornado anda todo estresado estos días... y es que el calor nos está afectando a todos...
Pero le comprendo, mejor de lo que nadie puede hacerlo porque yo soy así todo el tiempo... cómo en una montaña rusa voy cambiando de emociones porque a mí lo de ser racional no se me da bien... yo "lo vivo" y lo que "hago" me hace feliz...
Como por ejemplo hacer que mis hijas hayan tenido un comienzo de día feliz...
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